Una semana después de la celebración de la Semana Santa, en la que Maspalomas ha contado con unos registros turísticos entre el 85% y el 90% de la ocupación hotelera, con la satisfacción empresarial, en todos los sectores que se mantienen alrededor del ámbito turístico, es de señalar que continúa una gran afluencia de viajeros y turistas.

Lo que, por otra parte, es, al mismo tiempo, una buena señal en cuanto se refiere al ritmo habitual, a este inmenso rincón de tantos y destacados atractivos turísticos. A pesar de que comienzan a marcharse numerosos extranjeros que suelen pasar en Maspalomas la temporada que se comprende entre septiembre-octubre y abril-mayo.

Un incentivo más en el sector de la mayor importancia y relevancia económica de Maspalomas, de San Bartolomé de Tirajana y de Gran Canaria y de las Islas Canarias, como es el que representa histórica y habitualmente el motor turístico, y que deja constancia expresa y manifiesta, una vez más, del compromiso y de la capacidad de esfuerzo, por parte de los empresarios en el proceso de continuar aplicando las políticas más idóneas y más adecuadas para la atención y defensa de los intereses del sector turístico.

Una temporada, la actual, que sigue a la de Semana Santa, con altos registros de visitantes, y que hace mirar con un poco más de optimismo y de esperanza en que se continúen desarrollando estas afluencias de turistas, procedentes, fundamentalmente, de los países centroeuropeos y nórdicos, así como de diferentes partes de la península. Más, aún, la referente a estos últimos, en función del buen tiempo reinante en esta temporada de primavera así como de los preparativos más adecuados conforme al turismo habitual de la próxima temporada veraniega, que se potencia al máximo durante los los meses de julio y agosto aprovechando el disfrute de las vacaciones.

En este sentido según han manifestado diversas fuentes hoteleras, de restauración, de viajes, de coches de alquiler, de excursiones turísticas, tanto de playa como de montaña, de deportes naúticos y del resto de actividades complementarias e incrustadas en el sector, esperanzados en que continúen desarrollándose y registrándose estas buenas cifras y estos buenos registros como los que ahora también siguen marcando los parámetros en el sector turístico.