La jornada, de gran bullicio y alegría, conforma un encuentro que revive las tradiciones de la pesca en el municipio
La Aldea congregó este jueves a ocho mil personas en el Día del Charco, la celebración más popular y representativa de las Fiestas patronales en honor a San Nicolás de Tolentino.
A las 17:00 horas, tal como marca la tradición, y tras el volador que marca la salida, vecinas, vecinos y visitantes se lanzaron al Charco entre nerviosismo, ilusión y diversión por capturar el mayor número de lisas, en un acto que se ha convertido en seña identitaria del municipio que aúna historia, cultura y tradición.
El alcalde de La Aldea, Pedro Suárez, señaló en su primera fiesta del charco como máximo representante de la Corporación, “la emoción y responsabilidad que se siente en una fiesta única como esta que nos reafirma como pueblo y que, año tras años, se convierte en un reclamo para quienes no conocen nuestra celebración”.

Un participante en el Día del Charco, en La Aldea de San Nicolás, con una de sus capturas
Rama, Romería y Charco
La concejala de Festejos, Leandra Delgado, señaló que las fiestas patronales dedicadas a San Nicolás de Tolentino son el sentir de un municipio que, como bien dice la canción, “está alejado de la capital” pero “muy cerca de los corazones de la población de Gran Canaria”.
En esta edición, Abián Valencia León se alzó con el premio a la captura de mayor longitud y peso con un pescado de 1.100 gramos y 47 centímetros, mientras que Ancor Jiménez Ramírez se hizo con el reconocimiento al mayor número de capturas.
Una tarde emocionante en la que no faltaron las parrandas y el ambiente familiar durante el almuerzo después de haber bailado desde las doce del mediodía hasta las dos de la tarde en el muelle de La Aldea con el acompañamiento inconfundible de la banda de Agaete, que hizo saltar a todo el público asistente, bailar y corear temas imprescindibles en el municipio como “Soy aldeano, señor”, en una programación popular de las Fiestas en honor a San Nicolás de Tolentino en La Aldea: rama, romería y charco.