¿Tiene arreglo la entrada y salida de la GC-1, entre Maspalomas y Las Palmas de Gran Canaria? Un accidente, generó un atasco durante horas…
Una vez más el recorrido habitual, que sufren y padecen tantos y tantos conductores todos los días, entre Maspalomas y Las Palmas de Gran Canaria se ha convertido en un infierno. Llegando a la altura de El Carrizal de Ingenio se encontraban con una caravana impresionante, a lo largo de los tres carriles, entre la desesperación, las prisas, el desconocimiento de sabe qué pasaba y los nervios…
Toda una gigantesca caravana, con miles de coches atrapados en ese recorrido, con las motos serpenteando por entre los carriles, y con las ambulancias que transitan, con frecuencia desde el sur de Gran Canaria hasta la capital. Mientras tanto, los accesos y los desvíos correspondientes, agigantaban la caravana «comenervios«, como la denominan muchos transeúntes, porque hay muchas horas, tanto en uno como en otro sentido, en el que la caravana, la impresionante de caravana, es un fluido constante de gestos, de miradas entre conductores, impacientes, atosigados por el reloj de las prisas, la hora del trabajo, y tratando de abrirse un imposible camino.
Un calvario continuo y permanente
Se trata de un calvario continuo y permanente. Y donde la inmensa circulación de vehículos empequeñece a esos tres carriles, que se hacen insuficientes. Más, aún, con el aeropuerto al medio, que es flujo de atracción de coches permanente. Ya pasado el cruce de Melenara, cuando ha transcurrido una hora bien larga desde la salida de Maspalomas, la caravana parece despejarse. Se divisa, a la izquierda una luz donde se lee «Accidente«, un coche de la guardia civil, los dos afectados por el alcance, y, hala, los conductores del carril abriéndose hueco, paulatinamente,
¿Tendrá remedio esta angustiosa situación que padecen los miles de trabajadores que transitan en uno y otro camino, sobre todo y fundamentalmente, a las horas punta, aunque ya horas puntas son prácticamente casi todas?
El inmenso y soberano atasco de hoy, como los que se producen y tienen lugar todos los días, es una gran asignatura pendiente del Cabildo de Gran Canaria, de los ayuntamientos y del Ministerio de Obras Públicas y Transporte, que tienen que defender, como sea, la búsqueda de las alternativas adecuadas… Aunque el hecho evidente es que la isla no da más de sí…