A mes y medio para la llegada de Nochebuena, el Ayuntamiento ya nos invita y desea a todos a una Feliz Navidad.
Desde el pasado viernes pueden verse los nuevos carteles en lugares emblemáticos como la rotonda donde confluyen la calle Datas de El Tablero y la avenida Alejandro del Castillo, o en la avenida de Gáldar, donde las grandes letras rojas, verdes y plateadas anuncian la inminente llegada de la Navidad.
Dos palabras sencillas —Feliz Navidad— que encierran toda la magia, la ilusión y los buenos deseos de esta época del año. Una tradición que se repite año tras año y que vuelve a llenar las calles de color, luz y sentimiento.
Una larga e inveterada tradición y que ya se ha puesto en marcha una vez más calentando los motores de ese hermoso tiempo navideño en el que los sueños se transforman en campos de magia, los anhelos en ilusión, los regalos en sorpresa…

Feliz Navidad
La tradición crece un poco antes cada año. Y, de día en día, con este pistoletazo de salida que nos marcan los letreros colocados por los operarios municipales, ya se avivan las primeras inquietudes los más pequeños al descubrir el avance paulatino de las esencias que conforman la Navidad:
Celebraciones diversas, reuniones familiares, la animación a la que invitan las luces de mil colores en las principales calles y avenidas, el alegre Parque Sur como una cita de numerosas atracciones para todos, la misa del gallo, las cartas, ay, a los Reyes Magos de Oriente, Melchor, Gaspar y Baltasar, los nacimientos que se colocan en las casas con la adoración al Niño Dios, las luces que destacan en puertas y balcones, el árbol de Navidad, los villancicos que suenan incesantes, la cabalgata de los Reyes por las principales calles de San Fernando de Maspalomas, entre caras de sorpresa, de magia, de color y de fantasía.
Ya va llegando, paulatinamente, la riqueza humana de la Navidad… Y el Ayuntamiento, con ese sabor tradicional que se desprende de unas tan entrañables fiestas, que a todos nos llegan al alma, que nos invita a todos a una Feliz Navidad.
Fotografías: Fátima Rodríguez Campos
