Cerrado desde hace más de 30 años, bajo la plaza de Timanfaya, nadie entiende su cierre a cal y canto
Por Ignacio Cáceres
Hace escasos días el periódico digital y diario «maspalomasplus.com» desvelaba uno de esos misterios en San Fernando de Maspalomas: La existencia de un centro comercial bajo el pavimento de la Plaza de Timanfaya, en uno de los centros más referenciales del municipio, ubicado a doscientos metros escasos del Ayuntamiento y que desde su misma construcción, hace ya treinta y dos o treinta tres años, permanece completamente cerrado.
¿Motivos? Esa es, precisamente, la gran pregunta que hoy se hacen muchos, tantos años después, cuando desde este diario hemos desvelado la existencia del Centro Comercial Timanfaya, que tantos y tantos desconocían, y que hoy por hoy, tan solo es un misterioso espacio de 1,487,17 metros cuadrados, y locales comerciales.
Un misterioso centro, ubicado en uno de los espacios más céntricos de Maspalomas, y del que la mayor parte de los vecinos y personas consultadas por «maspalomasplus.com» desconocían de su existencia.
Las claves de ese cierre, no las conoce nadie. Un centro comercial que solo sirvió en su día, cuentan algunos de los más veteranos de la urbanización, que data de 1.993, para refugio de vagabundos y ocupas, lo que llevó al cierre de sus instalaciones con una amplia cadena y evitar más acumulación de suciedad. Lo que no obsta para que los más desalmados continúen arrojando bolsas de basura, latas, garrafas, cartones, palos, colillas y otros numerosos objetos por los cinco respiraderos que ofrece el local.
¿Dónde están los respiraderos?
Los respiraderos del Centro Comercial Timanfaya, cerrado a cal y canto, se encuentran ubicados en los cinco grandes módulos pintados de blanco, que se sitúan alrededor de la cafetería Timanfaya. En lo alto de los mismos se encuentran unas grandes bocas, totalmente descubiertas, sin tan siquiera una red protectora, por donde entran las basuras que otros arrojan de forma despreocupada, insociable y hasta insultante para los vecinos.
Basuras de todo tipo y condición que, salvo en una lejana y remota ocasión, al parecer fue debidamente aseada. Pero el hecho evidente es que ni los operarios del Servicio de Limpieza y Basura entran en el mismo, ni, tampoco, por lo que el Centro Comercial se encuentra convertido en un basurero desde que «el dos de octubre de 1.992» «se informara favorablemente el reconocimiento final» y que «solo se ha efectuado en las viviendas y garajes, quedando excluído, por no estar acondicionado, el centro comercial», según corrobora con su firma el técnico municipal.
Nota simple de uno de los locales del Centro Comercial Timanfaya
Un espacio relevante para los vecinos
Un tema que consideramos relevante, por cuanto todo un amplio centro de esas características, como las ya especificadas, podría facilitar y posibilitar la puesta en marcha y dinamización de aulas y centros sociales, espacios de carácter convivencial y lúdico, y otros de manifiesta utilidad para el uso vecinal.
Treinta y tres años después… Aunque, como señala el refranero castellano, nunca es tarde si la dicha es buena. Aunque eso sí, parece que la ficha cuesta mucho en llegar.
En la fotografía se aprecian los cuatro respiraderos del Centro Comercial Timanfaya bajo el pavimento de la plaza del mismo nombre