La falta de frío, las altas temperaturas y el viento volverán a mermar mucho la cosecha, que sólo será de unos 15.000 kilos
Los agricultores de San Bartolomé de Tirajana dedicados sobre todo al cultivo de albaricoques en las medianías del municipio recibieron este miércoles las trampas de control contra la plaga de la mosca de la fruta (Ceratitis capitata) que facilita anualmente la Consejería del Sector Primario y Soberanía Alimentaria del Cabildo grancanario.
La entrega de los mosqueros se realizó en las dependencias del Centro Cultural Pancho Guerra, en Tunte, en un acto que coordinó y supervisó la Concejalía de Agricultura dirigida por la octava teniente de alcalde Araceli Armas Cruz.
Este año se han beneficiado de esta iniciativa una treintena de agricultores, que han recibido alrededor de 2.000 mosqueros con los que se pretende cubrir una superficie aproximada de 20 hectáreas plantadas de albaricoques.
Existe preocupación en el sector. La campaña de cosecha de albaricoques en el municipio de San Bartolomé de Tirajana se ha iniciado esta misma semana y se prevé una recogida global reducida de apenas 15.000 kilos, como sucedió el año pasado.
Esa disminución se debe a la climatología adversa que ha sufrido el cultivo. La falta de frío en invierno y las condiciones de calima, además de la elevadas temperaturas y el fuerte viento que han sufrido las plantaciones en los últimos días han producido una considerable merma en la producción.