La gravedad de una crisis sin precedente que preocupa gravemente, mientras el gobierno de Sánchez «pasa» de Canarias.
Por Ignacio Cáceres
Una vez más el equipo operativo y humanitario de Salvamento Marítimo, siempre vigilante y de guardia, veinticuatro horas de atención, ha salido al rescate de un cayuco que se encontraba a 23 kilómetros de la costa del sur de Gran Canaria.
Estamos en ese punto habitual de indigencia moral del gobierno socialcomunista de España, donde las Islas Canarias parece que les queda «demasiado lejos» al presidente del gobierno, Pedro Sánchez, y a sus ministros. Sobre todo a los más relacionados con el tema de la inmigración ilegal africana, como son el titular de Interior, Fernando Grande Marlaska, y el de Política Territorial, el canario y secretario general del Partido Socialista en Canarias, Angel Víctor Torres, que «pasan» vergonzosa y vergonzantemente del tema de la inmigración ilegal africana, que tanto han provocado y provocan con su efecto llamada, con su dejación de funciones, con su insensibilidad absoluta con Canarias.
Inmigrantes en manos de la mafia criminal
Todo porque Coalición Canaria y el Partido Popular les arrebataron el gobierno autonómico en las pasadas elecciones autonómicas. Lo que no perdonan, mientras, con su actitud de desprecio y abandono hacia Canarias, desde el palacio de La Moncloa y desde el gobierno, en ese intento de volver a conquistar la presidencia de Canarias. Lo que hoy por hoy se les presenta muy complicado y difícil.
68 nuevos inmigrantes ilegales en Gran Canaria. Personas que llegan desde lejanos lugares, huyendo de las crisis políticas, sociales, económicas, humanitarias, se ponen en manos de las mafias criminales, que operan a ambos lados de la mar, y se adentran en una terrible aventura en cayucos, en pateras, en lanchas neumáticas, al azar del destino, al azar de la vida.
Nota: Fotografía de Cruz Roja Española
