Con dos años de Gobierno municipal, PP-AV y CC marchan viento en popa a toda vela, con ¿la oposición? más perdida que un pato en alta mar
Por Juan de la Cruz
En mayo de 2023 se celebraron las elecciones municipales. La cómoda victoria en San Bartolomé de Tirajana por parte de la alianza PP-AV y Coalición Canaria, con14 concejales, por los 11 obtenidos entre PSOE y Nueva Canarias, facilitó, sin mayores problemas, un equipo de gobierno en el que las cosas son como son. Y quien quiera entender, que entienda.
Con dos años, en el ecuador de la legislatura, parece evidente que, más allá de algunas divergencias, como algunos conocen, la coalición conformada entre las dos fuerzas ganadoras marcha, como se diría, viento en popa y a toda vela, por tres motivos bien fáciles de entender:
Primero: Por la fuerza de la propia mayoría absoluta en sí, con Marco Aurelio como alcalde y Alejandro Marichal, como primer teniente de alcalde y un amplio bloque competencial en este último; segundo, porque la personalidad, fuerza política y capacidad de liderazgo tanto de Marco Aurelio como Marichal resulta más que evidente y mucho más potente que la de sus adversarios políticos, que se encuentran perdidos, bastante perdidos en las duras bancadas de la oposición; tercero, porque la salida del mando del anterior Ayuntamiento por parte de Concepción Narváez, como alcaldesa, que le dio muchas ínfulas, y el PSOE y de Samuel Henríquez, con las galas como primer teniente de alcalde, que también le dio muchas alas, en Nueva Canarias-Bloque Canarista, les dejó totalmente fuera de juego.
Una oposición diluida en un puzzle en el que sus componentes andan desencajados. Tan perdidos que, en el recorrido de esta primera parte de la legislatura, podríamos decir, sin temor a equivocarnos, que, salvo error, apenas se han movido de sus asientos.
Concepción Narváez, portavoz del PSE en el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana
Narváez y Henríquez no encuentran su sitio
De este modo el PP-AV y Coalición Canaria, bien armados en sus equipos, llevan a cabo su recorrido hacia la próxima cita electoral, acaparando actividad, noticias, actos, informaciones, fotografías, protagonismo, y, como consecuencia, un amplio grado de conocimiento popular, unos más que otros, mientras Narváez, ha perdido muchos enteros en un PSOE en el que el mando ha pasado a manos de José Carlos Alamo, desde su atalaya de consejero de Turismo en el Cabildo de Gran Canaria, y con su nueva ejecutiva, nombrada hace escasos días.
A la par Nueva Canaria-Bloque Canarista anda metida en un carajal inmenso, toda vez que Henríquez y los otro cuatro concejales se han trasvasado al nuevo partido Municipalistas Primero Canarias, eso sí, llevándose el acta edilicia. Aunque para lo que pintan…
Así las cosas Nueva Canaria-Bloque Canarista en San Bartolomé de Tirajana no ha sabido reaccionar hasta ahora, acaso a la espera del Congreso del partido, en julio, mientras que Henríquez, dictan algunos que le conocen bien, se mueve sagazmente a la sombra que le cobija. Que, fuera, hace mucho frío…
Podríamos señalar, pues, que mientras el gobierno se mueve como pez en el agua, la oposición del ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana está hecha un desastre, con una sorprendente escasez de movimientos, con limitación de ideas, con debilidad de fuerzas, sin rumbo fijo…
Y con la que anda cayendo en el plano nacional, qué quieren que les contemos… Blanco, en botella y que pone Millac, leche.