Tras el habitual paréntesis vacacional, con la consecuente sequía informativa, el martes, se supone, arrancará el curso político
Por Juan de la Cruz
El martes próximo, 9 de septiembre, tras la celebración de la festividad en honor de la Virgen del Pino, que congrega a miles y miles de grancanarios en Teror, se supone que arranca el curso político con sus características y pormenores habituales.
Un inicio de curso que a, veinte meses para la celebración de las próximas elecciones municipales y autonómicas, comenzará poco a poco a poner sus motores en marcha, dentro de esa actividad operativa política, ya habitual, cuando empieza a funcionar la normalidad habitual del curso en todos sus esquemas.
Tras un seco agosto en el panorama informativo tirajanero, salvo los períodos de guardia de los principales partidos, en este caso concreto la alianza conformada por el Partido Popular -Agrupación de Vecinos y Coalición Canaria, como equipo de gobierno en el Ayuntamiento, mientras que la oposición, con los vaivenes del Partido Socialista y no sabemos si Nueva Canarias-Bloque Canarista y/o Municipalistas Primero Canarias (que es un asunto «sui generis»), han decidido dejarse llevar por las inercias vacacionales.
La rentrée y la política nacional
Ya, pues, a cuatro días, nunca mejor dicho, se inicia un curso con una serie de planteamientos, de propuestas, de proyectos y de actividad que se irá notando paulatinamente. En un tiempo en el que los partidos más potentes a nivel nacional no dejan ni cesan de mirar al panorama de la más que densa actualidad informativa española, de extraordinarios pulsos políticos, judiciales y electorales, porque, tal como todos sabemos, cada día tiene su afán, y echarse la prensa a la vista, hace latir mucho la dinámica de los sobresaltos…
Ojo, pues, porque de los huracanes, vendavales, tormentas y terremotos que se ciernen sobre esa fenomenología política nacional, pueden moverse y agitarse por entre algunas vías municipales con su carga de influencia y profundidad.
A buen entendedor, pocas palabras bastan.