Parece evidente que los intereses marroquíes cada día se centran más en Canarias
Por Juan de la Cruz
Resulta bastante claro que la obsesiva mirada y actitud de Marruecos hacia las Islas Canarias, a tan escasa distancia geográfica, deja constancia expresa y manifiesta de que la dirección política del país alauita solo vela por la defensa y ampliación de sus propios intereses. Y, con la vista puesta siempre, no casualmente, en el Archipiélago canario, y en contra de la comunidad autónoma de Canarias y la nación española. Así se deduce en la inmensa mayoría de esas noticias que, en ocasiones, por una multitud de circunstancias, permanecen ocultas y escondidas en la panorámica estratégica de Marruecos. Por muchas estrategias, de los más diversos considerandos y motivos. ¿O no?
Pero, entre unos y otros aspectos, ya sea la inmigración ilegal marroquí que llega en oleadas intensas e inmensas desde largo tiempo, sin mayores problemas, por parte de miles y miles de nativos que abandonan como buenamente pueden su país por la severidad de las políticas sociales, económicas y humanitarias; la cada vez más delicada situación en y sobre el Sáhara; los intereses comerciales del mercado marroquí, como acaece, por ejemplo, con las hortalizas y frutas; los beneficiosos tratados que arranca el rey Mohamed VI, cuando le apetece, de Pedro Sánchez, presidente del gobierno socialcomunista de España, mientras un demoledor silencio y pasividad, por parte de muchos, deja constancia de unas circunstancias que cada día son más preocupantes, en ese intento de desmedida y obsesiva ambición por parte de Marruecos, que no deja de mirar, de forma inquieta, a Canarias.
Claro que Marruecos mira hacia Canarias
La noticia, que se produjo ayer en el pleno del Cabildo de Gran Canaria, deja bien claro en su titular «El Cabildo alerta del riesgo para las Islas de los permisos de Marruecos a empresas israelíes para buscar petróleo y gas cerca de Canarias«, especificando con manifiesta transparencia que «la medida es contraria a la legalidad internacional, contribuye al expolio de un territorio sujeto a un proceso de descolonización guiado por las Naciones Unidas y pone en riesgo los intereses insulares«.
Bien es verdad, lamentablemente, que la moción salió adelante por el apoyo de Coalición Canaria, el Partido Popular y Nueva Canarias-Frente Amplio Canarista, y la escandalosa abstención de VOX y del PSOE, que, más aún desde la operación «Pegasus«, calla. ¿Por…?
La noticia que hoy publica «maspalomasplus.com» señala, además, que «Marruecos aprobó el mes pasado una licencia de exploración de hidrocarburos para la empresa israelí NewMed Energy en un área de 34.000 kilómetros cuadrados, algo más extensa que Cataluña o Bélgica, en aguas del Sáhara Occidental y colindante con las aguas de Canarias«, que «la decisión, publicada en el Boletín Oficial marroquí el 17 de febrero, pone de relieve el empeño de Rabat en explotar los recursos naturales del Sahara Occidental y su relación cada vez más estrecha con Israel, en absoluto alterada por la guerra de Gaza”, del mismo modo que se detalla que “el subsuelo en aguas del Sahara Occidental tiene las mismas características geológicas que en las áreas marítimas cercanas a Mauritania y Senegal en las que se ha descubierto gas«. Un avance del trasfondo de la información que debiera de preocupar, no ya solo en las esferas populares, sino en el gobierno español. Pero ante Marruecos, ya se sabe.
Es importante señalar, en este sentido, que «la apuesta de Marruecos por Israel en el Sáhara Occidental obedece a, entre otros motivos, que las empresas europeas no pueden invertir en el territorio ocupado ilegalmente por Marruecos tras las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europa, ya que la judicatura superior europea canceló, en octubre pasado, los acuerdos de pesca y asociación con Marruecos porque incluían al Sáhara Occidental sin que su población autóctona hubiera dado su consentimiento”.
Pues eso.