Pedro Sánchez y Angel Victor Torres, presidente y ministro canario, están demostrando una falta de consideración y respeto con Canarias que pagarán en las urnas.
Por Ignacio Cáceres
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España, y Angel Víctor Torres, ministro de Política Territorial, están dejando constancia con sus actuaciones y con su dejación de funciones, en el tema expreso y concreto de la crisis migratoria de Canarias, con la llegada de miles y miles de inmigrantes ilegales africanos a las costas canarias, y con su inhibición en el tema de los menas, que se niegan a cualquier acuerdo tanto con Coalición Canaria como con el Partido Popular.
En medio de una serie de graves crisis en diversos estamentos de la sociedad española, con numerosos problemas e inquietudes en todos los sectores de la población, por el desnorte del Gobierno socialcomunista –amnistía. Bildu, Cataluña y otros de extraordinarias responsabilidades– el tema migratorio, para Pedro Sánchez y Angel Víctor Torres, no supone más que el incremento de una pequeña gota de agua en el torrente de la inmensidad de la mar canaria.
Pero de tanta responsabilidad que la sociedad canaria ya se ha percatado, como hemos señalado días atrás, de que los dos altos responsables del Partido Socialista, están tratando de exprimir y aprovechar al máximo el tema de la crisis migratoria para intentar forzar, de uno u otro modo, la ruptura del pacto del gobierno de Canarias entre el Partido Popular y Coalición Canaria. Una indignidad de todo punto, porque los socialistas solo pretenden sacar una irresponsable tajada a base de crear más y más problemas al ejecutivo canario.
La sociedad lo sabe, lo conoce. Y de uno u otro modo estas cuestiones de tanta gravedad, que se alargan en el tiempo por la jugada socialista, más pronto o más tarde le habrán de pasar factura a los depredadores. Todo para ellos y nada para Canarias.
Peor aún, todavía, cuando Pedro Sánchez se encuentra sitiado por numerosos problemas políticos y de otro orden, como los de su esposa, Begoña Gómez, y Angel Víctor Torres cada día se encuentra más sitiado por el caso Koldo.