El Campo Internacional de Maspalomas, uno de los lugares más emblemáticos de esta zona turística, se encuentra, sin embargo bastante dejado de la mano del Ayuntamiento, cuajado de ilegalidades y con miles de residentes.
El Campo Internacional de Maspalomas, conformado como una zona de relieve en el panorama turístico español y europeo, se encuentra sin embargo, desde hace largo tiempo, muy abandonado. Se diría que, casi, desde siempre.
Las calles con luces que iluminan menos que una linterna de juguete, y en las que circular por las noches es un peligro y un riesgo, servicios como restaurantes, boutiques, tiendas diversas, supermercados de urbanizaciones y otras instalaciones, sin licencia de apertura, centros comerciales como el Faro 2, un emporio en sus tiempos, absolutamente desatendido y dejado de la mano de Dios, una más que significativa falta de vigilancia policial, los paseos y espacios libres de edificaciones, totalmente descuidados y abandonados, una manifiesta inseguridad, edificaciones con exceso de construcción legal y muy por encima de lo permitido por el Ayuntamiento en su día, inexistencia de paseos y bancos debidamente atendidos…
Todo ello, ejemplos a simple vista, supone y representa una serie de riesgos verdaderamente delicados… En esa injusta y cruel irresponsabilidad, por parte de quien corresponda, de que nunca pasa nada… Eso sí, asta que pasa.
Pareciera que sobre el Campo Internacional, un lugar emblemático, se ha ido tendiendo como un extraño manto de silencio, en sus numerosos recovecos de los vacíos legales y que son los aprovechan otros, los más avispados, y conocen la debilidad de otros, para montar sus negocios, por culpa del encogimiento de hombros de terceros.
También queda latente el derecho de toda justicia de que los propietarios de bungalows y apartamentos que adquirieron en su día, una cifra de miles de personas, tienen todo el derecho a residir en los mismos. Estén o no situados en complejos extrahoteleros, que tanto se benefician de las ilegalidades, de los silencios y los que miran para otro lado, creando polémicas innecesarias, entre unos determinados ámbitos empresariales (y desde estas páginas hemos aplaudido las numerosas inquietudes y esfuerzos del sector empresarial) que han abusado y se han extralimitado de los procesos legales y unos ciudadanos que quieren que se les escuche y no aguantar más injusticias como aquellas se viven y padecen en tantos y tantos complejos.
Aunque, afortunadamente, cada son menos los que conforman esa serie de complejos en los que la severa dictadura de las Explotadoras se impone, a su mejor criterio y beneficio, sobre las Comunidades de Propietarios, que disponen de múltiples hilos argumentales, que desmontaría cualquiera. Y cada vez existe un menor número en esa serie de Complejos Extrahoteleros porque los propietarios legales, que reciben unas escasas cantidades de alquiler por parte de las Explotadoras por dejar su bungalow como alquiler turístico, con el que mercadean los primeros, ya se han ocupado de ir recuperando sus viviendas legales…
El Campo Internacional –que en definitiva, al parece, no se ha recepcionado debidamente en el Ayuntamiento–, lo que de ser así necesita, de modo urgente, que alguien se atreva a proyectar el cumplimiento de la legalidad más absoluta sobre todo su espacio: Comercios, Urbanizaciones, Vigilancia, Seguridad, Paseos, Espacios Libres. Zonas de Recreo. Aparcamientos….
Pero ojo, y atentos, y que un día esperemos que no suceda una desgracia de alto voltaje… Porque las responsabilidades podrían resultar de un relieve extraordinario. Y quien quiera entender, que entienda…