Ganador de 43 etapas en el Giro, campeón del mundo, Cipolloni tiene el reto de ganar la EPIC 2025
La carrera ciclodeportiva EPIC Gran Canaria RIU Hotels & Resorts volverá a contar con el exciclista italiano Mario Cipollini en su línea de salida los días 8 y 9 de febrero, en la que será su cuarta participación en esta prueba que “se ha convertido en una tradición”.
El conocido y mediático sprinter, con una brillante carrera profesional entre 1989 y 2005 convirtiéndose en uno de los ciclistas con mayor número de victorias en su palmarés de la historia, ha asegurado que vuelve cada año porque es para él “una forma de reconectar con el ciclismo, con los aficionados y conmigo mismo”, por “el ambiente único del evento, las rutas espectaculares y la oportunidad de experimentar la pasión por este deporte sin la presión de la competición profesional

El extraordinario ciclista Mario Cipollini
Cipollini, Campeón del Mundo de 2002
Cipollini, que acumula gestas como el Campeonato del Mundo de 2002 en Zolder y la Milán-San Remo, ambas el mismo año y ya siendo un corredor de 35 años, ha afirmado que entrena durante el año “las subidas, que son una característica clave del recorrido de la EPIC” y que afronta “con el mismo entusiasmo que en el pasado”.
Ese “pasado” profesional de Mario Cipollini le colocó en la cima del ciclismo de la época, ganando hasta 43 etapas en el Giro de Italia, además de en otras grandes vueltas como el Tour de Francia o la Vuelta a España, etapas del Tour del Mediterráneo, del Tirreno-Adriático, del Tour de Georgia, de Catar, de Romandía, el Gran Premio Costa de los Etruscos, el Campeonato Mundial en Ruta, el Trofeo Luis Puig, Montee Carlo-Alassio, París- Niza, superando los 180 triunfos a lo largo de su carrera profesional.
Asimismo Cipolloni ha destacado que “La EPIC Gran Canaria no es sólo un reto físico, sino también una celebración del ciclismo. La mezcla de paisajes impresionantes, rutas desafiantes y una organización impecable la hacen única. No es sólo una carrera, es una experiencia que te sumerge en la belleza y la esencia del ciclismo”. Para el ciclista italiano, las contrarrelojes como las de Ayacata o Fataga “son memorables” y “completamente diferentes a mi pasado como velocista”, pero le dan “una enorme satisfacción personal” en esa “sensación de llegar a la cima después de una larga subida” que ha definido como “indescriptible”.
Finalmente ha dejado constancia de que “La EPIC es un reto, pero también un viaje extraordinario a través de algunos de los paisajes más bellos que se pueden encontrar. No se trata sólo de cronometrar, sino de vivir el ciclismo de una forma única”.