Una vez más, como cada año, Maspalomas se divierte, entre la tradición popular y los nuevos festejos, por San Fernando.
Por Juan de la Cruz
Una vez más, como siempre, Maspalomas se está volcando desde el pasado jueves en sus tradicionales fiestas en honor de San Fernando. Unas fiestas que se conforman con un marcado carácter tradicional, junto a la dinámica propia de los nuevos tiempos, y satisfacer, en la medida de lo posible a todos. Lo que se trata de compendiar en un programa de festejos cuajado de actos y de convocatorias para todos.
De este modo el jueves, con un más que novedoso pregón inaugural, cuajado de sensibilidad con aquel más que entrañable poblado de Maspalomas, que se ponía en marcha en los años sesenta, a cargo de un esforzado grupo de vecinos, en aquellos duros y severos tiempos, a caballo entre las calles de tierra y la carencia de luz, la necesidad y la lucha por salir adelante, hoy, sesenta y tantos años después, día a día, con el esfuerzo de todos, se ha alcanzado el dinamismo de un municipio que se identifica con el turismo, básicamente, principal motor de la economía, sí, pero manteniendo con exquisita fidelidad su identidad y su arraigo con la tradición popular canaria.
Maspalomas y su espíritu tradicional, popular y festivo
Con tantos años al medio Maspalomas se ha enriquecido con eses espíritu de una marcado identidad costumbrista, como refleja, sin ir más lejos, el precioso documento que se muestra en el cartel de las fiestas patronales, y tratando de dar cabida a una amplia serie de actos, de festejos y de citas en un muestrario para todos, gracias al trabajo y el tesón del equipo de la concejalía de Turismo, Festejos y Eventos. Tal como dejara constancia en la presentación del programa Yilenia Vega, al frente de ese entusiasta grupo de colaboradores que están bajo su mando en la concejalía.
Un pregón de gran simbología en el municipio, unos conciertos de variadas músicas, la «Masparranda» habitual, la romería con carretas y agrupaciones folklóricas, entre canciones y danzas populares, una solidaria ofrenda de productos para los más necesitados, verbenas, animación infantil, elección y proclamación de reinas y otros actos se dan cita, en este programa que todos, paisanos y visitantes, ya disfrutan en toda su intensidad y esplendor.
Un alto en el camino, para la diversión de todos, con el santo patrón a la cabeza cada 30 de mayo.
Unas fiestas cercanas, entrañables, próximas, tradicionales y populares, enmarcadas en una animación y en un bullicio por el que merece la pena alzar la copa y desear a todos unas «Felices Fiestas de San Fernando«, tal cual es nuestro mayor deseo.