El Ayuntamiento conmemora el Día Internacional de la Mujer resplandeciendo de morado sus edificios más emblemáticos y avanzar en el desarrollo contra la violencia machista.

Con motivo del Día Internacional de la Mujer, el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana ha iluminado este viernes los principales edificios públicos del municipio, como el emblemático Faro de Maspalomas, las Oficinas Municipales de San Fernando y las rotondas del pórtico canario y de las amapolas en la Avenida Alejandro del Castillo, con los tonos morados y violetas que identifican la lucha por la igualdad del movimiento feminista.

Dicha iluminación reivindicativa por los derechos de las mujeres y contra la discriminación social de las mismas se inició de forma gradual hasta alcanzar su máxima expresión sobre la media noche, en la que la explosión lumínica del color violeta se hizo visible y llamativa desde distintos enclaves de la ciudad turística.

Esta actuación representativa fue encomendada expresamente por el alcalde, Marco Aurelio Pérez Sánchez, a la Concejalía de Igualdad como un recordatorio social y público sobre la importancia que todavía tienen en todo el mundo las reclamaciones de inclusión e igualdad que demandan las mujeres.

Al respecto, en la última sesión ordinaria que celebró el Pleno de la Corporación una reflexión de la Premio Nobel de la Paz en 2014, Malala Yousafzai. “Ninguna lucha puede tener éxito si las mujeres no participan en ella junto a los hombres”.

Con el lema de Naciones Unidas para este 2024 “Financiar los derechos de las mujeres: acelerar la igualdad”, la declaración fue apoyada por todo el pleno “porque invertir en políticas para avanzar en igualdad de género es la piedra angular para crear sociedades inclusivas”.

Entre los acuerdos plasmados, el Ayuntamiento adquirió los compromisos de seguir trabajando por la igualdad y avanzar en el desarrollo de políticas igualitarias y contra la violencia machista y de género; exigir al Gobierno de Canarias una financiación suficiente para las políticas de igualdad, educativas y sociales “para mejorar el estado de bienestar”; y fomentar una cultura y conciencia ciudadana de género a través de la educación transversal en diversidad. “Necesitamos movilizar a la sociedad para participar en actuaciones que eviten el retroceso de los derechos de las mujeres con el fin de conseguir un mundo libre, inclusivo y sin violencia, donde se respeten los derechos humanos de mujeres y niñas”, puntualizaba la declaración.