La oleada de inmigrantes ilegales africanos a Canarias es incesante. Continúa la inactividad y la pasividad del gobierno de Pedro Sánchez.
El cayuco de cada día llegó en la noche de ayer, una vez más, a Arguineguín. En el mismo, que fue auxiliado por el equipo operativo y humanitario de Salvamento Marítimo, viajaban 140 personas a bordo, todas ellas de origen subsahariano, al sur de Gran Canaria.
El cayuco fue avistado a 138 millas del sur del archipiélago por un buque que viajaba de Portugal hasta Nigeria, por lo que desde el mismo se procedió a avisar, de forma inmediata, al equipo de Salvamento Marítimo.
Debido al mal estado del mar, el Centro de Coordinación de Salvamento en Las Palmas solicitó al buque que permaneciera en la zona hasta la llegada de la guardamar ‘Calíope’.
Una vez allí, la embarcación de Salvamento Marítimo procedió al rescate de los 140 ocupantes del cayuco, entre ellos 20 mujeres y 2 menores, a la espera del recuento en tierra.

La inactividad del gobierno de Pedro Sánchez
Continúa de un modo permanente, totalmente descontrolado, la llegada constante de unas inmensas oleadas de inmigrantes ilegales africanos, que se lanzan a la aventura de la mar, en manos de las mafias criminales, y arriesgando su vida por llegar a Canarias.
Todo ello con la inhibición de gobierno de Pedro Sánchez, que continúa sin hacer nada por evitar que la ruta canaria de la inmigración, la más peligrosa, continúe invadida de pateras, de lanchas neumáticas, de cayucos, un día sí y otro también, procedentes de Marruecos, de Senegal, de Mauritania, de Mali, perdiendo el control de forma absoluta y total de los inmigrantes ilegales que llegan a Canarias, mientras la población se formula numerosas preguntas en torno a los mismos: qué hacen durante el día, a qué se dedican, con quién contactan, dónde se alojan, de qué viven…
Toda una amplia problemática social que crece de día en día en Canarias y de un modo, cada día, más preocupante desde la perspectiva social canaria.