Si ayer dejábamos constancia de los núcleos chabolistas que circundan el Barrio Calderín, hoy los hacemos del lamentable estado y riesgo que conforma la carretera entre El Tablero y el referido barrio. Un camino asfaltado y abandonado, tercermundista, peligroso y ante los conductores no tienen más remedio que ejercitar la paciencia y la resignación. Hoy, desde maspalomasplus.com, las imágenes.

Una estrechísima carretera, sin arcenes, con chabolas al fondo y las luces de llegar hasta El Tablero, afortunadamente

Una carretera dejada de la mano de los responsables, sean quienes sean, sin señalación alguna, sin arcenes, con pronunciadas curvas, y que conforman unas imágenes deleznables. Pero de las que nos sentimos en el deber de dejar constancia para la conciencia de quienes deben de asumir, en su conciencia, las adversidades y el riesgo de quienes circulan por tamañas carreteras. Indignas, por cierto, de llamarse carreteras. Si, acaso, caminos con asfalto.

A la vera misma del camino y al fondo del mismo. Una imagen vale más que mil palabras.

Sentimos pavor y vergüenza ajena, mientras circulamos con la extrema prudencia, y pensando en cuantos se sienten obligados a conducir sus vehículos…

Sorprende que a estas alturas del siglo XXI, a escasos kilómetros del impresionante núcleo y sector turístico que mueve los motores de la economía, de la imagen y de la publicidad de Maspalomas, en una cita gigantesca con un lugar estrella y de vanguardia en el ordenamiento turístico, en sus proximidades, a escasos minutos, se encuentren estas secuencias…

Basuras, curvas estrechas y cerradas y chabolas, a un tiro de piedra de El Tablero…

Resulta demoledor circular por ese camino asfaltado, de baches, de estrecheces, de curvas, de coches que van y vienen ralentizando su marcha, si es que se cruzan en el camino…

¿Quién es el responsable de semejante y tamaña despreocupación, sobre el que circulan conductores entre adversidades y contrariedades de quienes andan en cómodos despachos?

No son pocos, no, los vehículos que transitan por el camino asfaltado…

Basuras, ramas secas, campos yermos y abandonados, núcleos chabolistas…

Camínese en cualquier dirección de esas mal llamadas carreteras, o la que lleva hasta El Salobre, todo es el mismo panorama de descuido, de abandono, de dejación, de irresponsabilidad…

¡Qué lástima pasar por estos lugares por el que circulan numerosos vehículos, de tirajaneros y de turistas…!