David Silva, un referente, un legendario y un icono del fútbol, se ve obligado a retirarse por culpa de una lesión. Lo que ha anunciado en medio de la admiración y el reconocimiento de todos.

La figura y la trayectoria del jugador grancanario, nacido en Arguineguín, se conforma como todo un ejemplo de calidad, de esmero y de superación. Un ídolo del fútbol, en su lugar de nacimiento, en todo Canarias, en España y uno de los referentes del fútbol mundial, como se aprecia en una trayectoria admirable y ejemplar.

Aquel muchacho que, desde muy pequeño, como tantos, saltaba a los campos de fútbol con esa ilusión de todos y con ese genio y esa raza de los grandes, de los más grandes. Tanto que ya, militando como cadete en el San Fernando de Maspalomas, donde se iba transformando en uno de los grandes motores del fútbol local, pasó, con apenas catorce años al Valencia. Y, desde ahí, una carrera imparable. En la que han convergido su esfuerzo, su talento, su astucia, su valentía y, sobre todo, su encomiable espíritu de lucha, de competitividad y de deportividad.

Un conjunto de valores que le han llevado a lo más alto del pabellón futbolístico, honrándonos a todos y siempre con el nombre y la bandera de Arguineguín por todos aquellos lugares en los que ha defendido los colores de los diversos equipos en los que ha militado. Destacando entre todos ellos, claro es, el de haber sido un jugador imprescindible y emblemático en la selección española de fútbol, luciendo la camisola roja del equipo español con el orgullo de la raza de un deportista de extraordinarias virtudes y cualidades.

En esta hora de su despedida, David Silva, una figura del fútbol, recoge los elogios de todo el panorama deportivo español y europeo. Genio, figura, legendario, y otros calificativos se destacan hoy en numerosos medios de comunicación. Y a los que nos unimos, de todo corazón y con el mayor reconocimiento a toda su larga y brillante trayectoria desde el periódico digital «maspalomasplus«.

Gracias, pues, Silva, querido amigo, por tu extraordinaria semblanza y figura deportiva, tan reconocida, afortunadamente, por todos.

NOTA: En la imagen, Silva, con la camiseta de la Selección Española y la bandera canaria en 2012.