Arguineguín, al sur de Gran Canaria, aquí mismo, al lado de Maspalomas, se encuentra con la llegada permanente de pateras, de cayucos, de lanchas neumáticas, que vienen, siempre, repletas de inmigrantes ilegales.

Lo hemos denunciado y lo estamos denunciando por activa y por pasiva, lo divulgamos en nuestro periódico digital y diario,»maspalomasplus.com«, por tres razones fundamentales:

En primer lugar porque consideramos que es nuestra obligación periodística e informativa. En segundo lugar, porque entendemos que es un compromiso muy serio, por parte de todos, de máxima responsabilidad, y, además, por un profundo sentido humanitario. Esto es, por el bien de todos. En tercer lugar: Porque también es nuestra responsabilidad, y porque Arguineguín, por el mayor y mejor bienestar, no puede continuar siendo una de esas capitales de la inmigración ilegal de tantos y tantos africanos que llegan como llegan, desde dónde emigran y con unos destinos que solo ellos y la propia vida sabrán por qué caminos se adentran en medio de una serie de misterios, si es que los saben, y de los que alguien o algunos, mejor dicho, a ambos lados de la mar, la costa africana y la española, debieran de dar cuenta de una vez por todas, con la mayor claridad y transparencia.

¿Por qué? ¿Por qué causas se produce y se permite tanta y tan continuada inmigración ilegal a las Islas Canarias que pareciera perfectamente escalonada, tal como se aprecia a simple vista?

Las Islas Canarias, españolas y hospitalarias, siempre están y se encuentran en la mejor disposición de socorro, de ayuda y de acogida en ese cruce de caminos de tantos cientos y miles inmigrantes ilegales, y de quienes, son muy pocos, los que saben de su vida. De su vida y de sus vidas. Y hasta,, podemos imaginar, que conocen su origen, su trabajo, su procedencia, su dedicación, salida de su país, su viaje, a través de las olas de la mar atlántica y hasta hacia dónde van…

Como posiblemente sepan qué levan consigo, de qué se mantienen, dónde habitan, hacia donde se dirigen… ¡Cuán difícil y complejo resulta vivir así…! Aunque fuera en la propia clandestinidad o a través de esos grupos y de redes mafiosas y criminales, que abren los caminos y los senderos de muchos de esos inmigrantes ilegales… ¿Por qué motivo?

¿Es que, en realidad, no hay nadie que pueda poner coto a tanta inmigración como la que llegando a Gran Canaria se desperdiga por tantos puntos de España?

¡Basta ya…!