Desde su aparición «maspalomasplus.com» está abordando, en profundidad, el dramático argumento de las pateras. Con artículos y testimonios. Estamos de acuerdo con Onalia Bueno en que debiera de desaparecer la pavorosa estampa de un puñado de pateras en el Muelle de Arguineguín.

La tragedia humanitaria, social, económica, política, y otros severos problemas que se arraigan en los países de origen de los inmigrantes ilegales, sobre todo las que llegan desde Marruecos y Senegal, que son las más numerosas, reflejan unos testimonios de impresionante dolor. Pero son bastantes los responsables que se esconden, con crueles silencios, detrás de tanta patera, de tanto cayuco, de tanta lancha neumática. Las redes de las mafias criminales a uno y otro lado de la mar.

Aunque también consideramos que la inacción y los silencios de Pedro Sánchez, que ni se pronuncia ni se le espera, a pesar de los últimos llamamientos del presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ante Su Majestad el Rey Felipe VI, igual que la inacción y los silencios del rey Mohamed VI, son también, en cierta medida responsables de esta escalada de la inmensa avalancha de seres humanos que, conformando una mercancía que transita desesperada, desde la encrucijada de las aguas de la mar africana, en el ansia de alcanzar la costa canaria.

Lo que no puede ser un argumento de justificación alguna para la huida de tantos inmigrantes ilegales que llegan, como buenamente pueden, aguantando una travesía, que resulta toda una crueldad, a bordo de humildes pateras, de pobres cayucos, de débiles lanchas neumáticas, a lo largo de un tiempo severo y a expensas de la carencia de alimentos, de agua, de los envites del calor y hasta de las olas, que, en ocasiones, se llevan por delante, la vida de tantos seres humanos, como los que desaparecen, silenciosamente, en la mar…

El lector puede repasar la hemeroteca del periódico digital «maspalomasplus,com«. Y desde el más profundo sentimiento humanitario, en este problema de una gigantesca dimensión como la que aparece en Canarias, se hace necesaria el mayor esfuerzo por parte de las más altas autoridades, empezando por el rey Mohamed VI y Pedro Sánchez, y vehicular las consideraciones adecuadas para poner freno a estas oleadas de seres humanos y de buscar todas las ayudas desde los gobiernos y la Unión Europea.

El viernes, ante la noticia que publicábamos en «maspalomasplus.com» con la opinión de Onalia Bueno, alcaldesa de Mogán, solicitando la desaparición de las pateras en el Muelle de Arguineguín, nos dimos una vuelta por el mismo. Y nos acercamos hasta el área en el que se agrupa un puñado de pateras, con inmensos silencios, soportando el temblor de las aguas, inundadas de gritos, de silencios, de llantos, de esperanzas…

Y, ante ese puñado de las pateras, allá, en el Muelle de Arguineguín, junto a la Salvamar «Macondo» pudimos entender la solicitud de Onalia Bueno. Una imagen preñada de angustia y que, es cierto, genera una imagen de esa desolación que se percibe desde la lejanía y que duele, en lo más profundo del alma, en la misma cercanía, desde la alta alambrada que impide acceder a las pateras.

Una imagen lamentable, cierto es, en el Muelle de Arguineguín, y donde la mejor estampa, desde luego, no es la de unas humildes, pobres y misteriosas pateras que han salvado millas y millas para dejar en la costa canaria a cientos y cientos de africanos que deambulan por tantos lugares… Por la culpa de tantos que callan como si la inmigración ilegal, como la que se vive en Canarias, no fuera con ellos. No es que no vaya con ellos, no. Es que es, supone y representa una tremenda, inmensa responsabilidad de muchos.

Y a buen entendedor, pocas palabras bastan.